sábado, 2 de enero de 2010

Es curioso



La noche de fin de año se llena de burbujas y de propósitos que luego no cumplimos, de purpurina y lentejuelas, de abrazos rotos y pequeños alborotos y miradas por encima del mantel o por debajo. Es una noche curiosa en que las uvas se convierten en silencios y los silencios en momentos. Y cerramos los ojos y pensamos que sí que valió la pena. Recordamos a los que ya no estan, a los que no estan porque no quisieron a los que nos gustaría que estuvieran. Sonreímos sin querer y queremos estar sin saberlo.
Todo es rápido.
Mi noche me sabe a arándanos y limón y es de color naranja.
Subiendo escaleras para tamborilear con los deditos en camisetas grises y pintar cuerpos que andan sólos. Borrando lienzos despacito para volver a empezar.
Y se te pegan las pestañas y el sueño se te cuela por las orejas pero no puedes dejar de hacer nudos con las manos. Y cuando llegas a casa y te colocas los calcetines piensas en que tal vez al otro lado también podré escuchar a Janis Joplin sin traicionarla.
Tal vez sea otro momento.Un momento raro. Me gusta.

1 comentario:

Camiseta dijo...

Mmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm... copado

Copado también lo de joplin