lunes, 21 de enero de 2008

Más de mil razones más de mil motivos...

Los amantes de Sabina conocen de sobras la canción y es que hay mil razones para no cortarse de un tajo las venas. Las flores amarillas que compraste con el cambio del súper, la ropa limpia, el calorcito del sofá, las malas lenguas que te hacen pensar en que más vale que hablen de tí aunque sea mal, soñar con él, los malos ratos, los buenos ratos, mi alfombra color verde aceituna, Angel González, Ian, los macarrones de mi abuelita, mi cafetera, los domingos por la mañana, mi gente, er Camarón, los amigos que ya no lo son y que te recuerdan los que todavía tienes, Patxi y sus movidas, Los Pilares de la tierra, Beautiful girls, ver como sale el sol cuando te marchas a trabajar, mi padre y sus teorías, los engaños, The Mortimers, la sonrisa de mi madre cuando sabe lo que quiero contarle, Anatomía de Grey, la sinceridad de algunos, la hipocresía de muchos, el saber estar, el no saber dónde estás, el hacer feliz a alguien, quererle aunque no lo sepa, el olor a incienso, el País Vasco, un abrazo, un "nos vemos".
Este fin de semana alguien no lo ha pasado demasiado bien por circunstancias varias. Este artículo va por ella. Para que siga confiando en que aunque en ocasiones parezca imposible, a veces, pasa.

3 comentarios:

Jordi Casanovas dijo...

El Sabina és un patilleru!

Bet dijo...

Mis razones son una buena sonrisa y un abrazo sincero.


Anónimo dijo...

Muchas veces tambien hay mas de mil razones, mas de mil motivos para dejar a una persona... mas de cien mentiras, cierto?